26-nov-12.
Hemos olvidado quienes somos, quizás nunca lo supimos.
Todo parece pasar tan rápido cuando tienes la noción del
tiempo, cuentas cada minuto, cada día y cada fecha.
El tiempo avanza con prisa, hijos que crecen en un espabilar
y padres que mueren el un latir. Volteas, ves recuerdos, recuerdos muy lejanos,
porque los mas cercanos ya han de ser olvidados.
Miras una foto, una letra, una melodía, un olor, un sabor,
un sonido, un rostro, una voz, o incluso, una textura, en la oscuridad recreas
tu existir, vives la "vida" que no viviste al creer que vivías,
piensas y solo dices fue lindo haber vivido eso.
El recuerdo no dura, se desvanece en la luz y regresas de tu
viaje en el tiempo, fue tan rápido que el
viaje no duro sino unos cuantos segundos.
La luz es apreciada por los ojos una vez mas, vuelves a respirar y caminas
rumbo a lo que buscas, una flor, un fruto, algo de corta duración, o
simplemente un pobre instante de riqueza o un triste momento de alegría, corres
sin detenerte, eres libre para vivir, barres el polvo, saltas las rocas, miras
gente, ves personas y observas rostros, dejas de correr, ¡ Ya no hay camino!,
No Señor, usted hace el camino, te decides, trotas, y ves ahí el gran punto,
ese punto negro, solo y que por lo general es el ultimo, el punto final.
Punto infinito, no porque no tenga fin, sino porque lo
padecen infinidad de escritos.
A.S.B
Andrea Suárez B.
Andrea Suárez B.
No hay comentarios:
Publicar un comentario